“Y lo hermoso nos cuesta la vida…”
Transcurrida ya una semana que mi compañera Carla y nuestro hermano
Iván, fueron apresados por fuerzas de carabineros en una pobla de la
zona sur, en manos de la policía de los ricos, aparato históricamente
denostado por sus prácticas de persecución, represión y muerte. Comienza
esta caraja “noticia”.
El momento exige la urgencia de la palabra, romper con los supuestos
y reafirmar las miradas, por ello sientan el apoyo incondicional de
amor y forma de vida. Para ti amada Carla, para ti querido Iván, en
este, su proceso de prisión como rehenes del gobierno de los ricos y su
entramado estado-cárcel-capital.
Que el brillo fecundo de sus ojos no amaine y la fortaleza sea una
constante para abrazar una pronta realidad distinta de más vida. “Ahora
es la solidaridad compañera que entra secuestrada a las jaulas, ya no
como gesto de ternura y compañerismo hacia su amante, sino como un
castigo por ser una rebelde.”
Lo indesmentible de aquella madrugada es la detención por parte de
carabineros, de Carla e Iván, para luego ser trasladados a su cuartel de
represión y tortura. Transcurridas las horas son exhibidos
mediáticamente por supuestos “elementos que en su conjunto podrían
configurar un artefacto explosivo”. Esto bajo una arenga esquizofrénica
con sonrisa burguesa y aplausos inquisidores de un poderoso de turno
llamado Hinzpeter. Todo este aparataje mediático, se instalaba en escena
en paralelo a la audiencia de preparación de juicio en el Tribunal, a
la cual asistíamos aquel lunes 16 de abril, Fredy, Marcelo y Yo (Juan).
De lo que somos y seguiremos siendo en este presente de guerra
social. Nos sentimos íntegros, rescatando las prácticas y el coraje de
cada decisión-acción, todo cuanto logre fundirse con otras acciones
desplegadas en la confrontación de lucha de clases, es y será
reconocernos para más subversión.
La persecución, represión y prisión son una constante y posible
realidad para todos quienes decidan por sus vidas ante esta miseria
diaria incrustada por el capital.La condición de nuestros seres
queridos-familiares-amigxs, no es ajena esta persecución policial
represiva.
Nada tenemos que ver con la enajenante maquinaria del gobierno cuya política alienante crea el escenario y busca vinculaciones dotadas de ficción o cartas de amor que justifiquen un supuesto “terrorismo criollo”, cuya única veracidad son las enajenantes penas “ejemplificadoras” de encierro para quienes se rebelan a su paz social.
Nada tenemos que ver con la enajenante maquinaria del gobierno cuya política alienante crea el escenario y busca vinculaciones dotadas de ficción o cartas de amor que justifiquen un supuesto “terrorismo criollo”, cuya única veracidad son las enajenantes penas “ejemplificadoras” de encierro para quienes se rebelan a su paz social.
A los nuestros indómitos de clase. Plasmo mi
descontento-autocritica con bronca, donde el amor y la piel son
incondicionales. Mas la fuerza para señalar que lo ocurrido, hay que
fijarlo en la retina del aprendizaje, donde más que cubrirnos con las
brisas del temor-miedo, dancemos con sigilo y precaución, con los ritmos
de un ataque salvaje y fértil variado en sus colores-formas, saboteando
la paz de los ricos, desenmascarando su espectáculo de cotidianeidad
burguesa. Dejamos de ser espectadores de nuestras propias miserias, la
piel se cubre de solidaridad, las razones sobran y el momento de
subvertir siempre lo ha sido.
El trago amargo de que compañerxslindxs estén en prisión como
rehenes, no se queda en el dolor, se transforma en ira-fortaleza, en
intensión-deseo de reafirmarnos en el aporte, en la batalla cotidiana en
la lucha anticarcelaria. Realidades concretas de resistencia y combate
entre otras, contra la maquinaria estado cárceles-capital.
Escrito lo anterior, la atención presente debe ubicarse en
multiplicar la solidaridad con Carla e Iván, así como con todos los
presos de la guerra social. La memoria es la munición que carga el arma
de la solidaridad, no somos espectadores de nuestras vidas, decidimos
sobre ellas. El odio de los poderosos se refleja en represión constante,
mas el amor, la complicidad de vida y el respeto de todos quienes
luchen en pos de la revolución social y la destrucción de todo cuanto
nos oprime, es nuestro oxigeno.
Fuerza amada mujer, fuerza querido Iván.
¡Mientras exista miseria habrá rebelión!
¡Abre los ojos es tiempo de luchar!
¡Por la destruxion de la sociedad karcelaria!
¡Solo la lucha nos hace libres!
¡Abre los ojos es tiempo de luchar!
¡Por la destruxion de la sociedad karcelaria!
¡Solo la lucha nos hace libres!
Juan Aliste Vega
Prisionero Subversivo.-
23 de abril 2012 Cárcel de alta seguridad.
Stgo-Chile.
Prisionero Subversivo.-
23 de abril 2012 Cárcel de alta seguridad.
Stgo-Chile.
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